Hace escasos días se gastaron más de 3.000 euros en pizzas y kebabs para los ilegales llegados en patera pero no quieren hacer la prueba PCR a la UIP de Málaga por si alguno da positivo y tienen que permanecer todos quince días más en Cartagena con sus correspondientes dietas
Lo que está pasando con este Gobierno es verdaderamente muy triste. Ya no sólo es que permite la llegada descontrolada de pateras, haciendo la vista gorda, es que además da prioridad a éstos y toda ONG que se beneficia de ellos antes que a las distintas autoridades que velan por nuestra seguridad. De los ciudadanos cartageneros ni hablamos. Somos la última mierda para ellos.
Y es así. No es racismo y demás tonterías que pueden decir los ‘progres’ de turno. Es una realidad. ¿Quieren pruebas? Aquí las tienen.
Con la masiva llegada de inmigrantes ilegales que invadieron Cartagena en las últimas semanas, el Gobierno se vio en la obligación de pedir ayuda. Y la obtuvo rápido, ya que alrededor de 50 integrantes de la UIP (Unidad de Intervención Policial) de Málaga se personaron en Cartagena al momento de ser requeridos.
Colaboraron día y tarde. Estuvieron al pie del cañón. Se enfrentaron cara a cara con los ilegales más agresivos y estuvieron en contacto directo con más de un positivo por coronavirus.
¿Qué sucede? Pues lógicamente, ahora que regresan a su hogar, quieren que se les haga la prueba PCR para saber a ciencia cierta si están contagiados y no poner así en peligro la seguridad de sus familiares y amigos cuando vuelvan a su hogar. Algo lógico y obligatorio, ya que si hay aunque sea un positivo, el virus podría tener rebrotes más que considerables.
Pues bien, ¿saben qué ha hecho nuestra querida delegación de Gobierno? Negarles la prueba PCR. Le hacen la serológica, que tiene una fiabilidad del 20% y ya cuando estén de vuelta en Málaga, que se hagan allí la PCR. Algo a todas luces incomprensible.
Pero tiene una explicación, y vergonzosa además; si al hacer el PCR sale aunque sea un positivo entre los 50 integrantes de la UIP, tienen que quedarse todos 15 días más en Cartagena, por lo menos, y hay que pagar más dietas y correspondientes hoteles. Es preferible que se vuelvan a su tierra con un posible virus a la espalda.
Y es que para nuestro Gobierno es más importante gastar el dinero en el bienestar de los inmigrantes y en las ‘necesidades’ de las ONGs que en la seguridad de sus policías y ciudadanos.
Más de 3.000 euros en comida basura para el capricho de los ilegales
Cartagena y sus autoridades colapsaron con la llegada de más de 400 inmigrantes ilegales. Faltaron medios por doquier para atender las necesidades de todos, pero se hizo un sobre esfuerzo, ya que para esta gente no puede faltar de nada.
Y decimos de nada porque estos ilegales se negaron a comer durante dos días el menú establecido. Encima exigencias.
No vamos a valorar si la comida era un manjar o no. Es lo que había. ¿O que ustedes exigen cuando le sirven un plato con una patata cocida sin sal estando en un hospital?
Pues esta gente se negó en rotundo a comer y se les llevó una noche pizza y a la siguiente kebab. Pizza y kebab para casi 200 personas…saquen cuentas…
¿Se imaginan ustedes en un hospital o detenidos y decir hoy quiero un caldero y mañana un estofado? Este país es de risa. Perdón, los que nos gobiernan son de traca.
No hay PCR para policías que vinieron a ayudar jugándose el físico, pero si pizzas y kebabs para todo extranjero que entra en España de manera ilegal. Nos merecemos lo que tenemos. Es más, nos merecemos que nos quiten lo que tenemos.
